Fuente: UNAM
Aunque nos hace sentir seguridad, no es una barrera efectiva contra los gérmenes porque el papel higiénico es poroso
Fuente: UNAM
La probabilidad de contraer una infección en un baño público es baja porque las pompis sirven como barrera natura
Fuente: UNAM
En esta posición los músculos de la pelvis se tensan y la “pipí” no fluye, y eso sí puede causar infecciones urinarias
Fuente: UNAM
De esta forma se evita que los microbios se dispersen a través de las gotículas de agua que expulsa la taza al bajarle
Fuente: UNAM
Los gérmenes expulsados al bajar la palanca de la taza pueden alcanzar una altura de hasta 1.5 m de altura y permanecer suspendidos hasta 1 hora
Fuente: UNAM
En promedio un inodoro puede expulsar hasta 47 gotículas con gérmenes que se depositan en superficies cercanas, como el piso
Fuente: UNAM
¡Mejor “nadota”! Enjuagarse las manos sólo con agua no elimina los microbios. Lo mejor al no tener jabón es usar gel antibacterial
Fuente: UNAM
Retener las heces puede hacer que te “tapes” porque al no salir la “popó” el cuerpo absorbe el agua de ésta y las seca
Fuente: UNAM